Invisibles

La vida esta llena de gente invisible.
Invisibles que han creado un mundo propio. No sabemos a que se dedican, cuales son sus sueños. El cojo es uno de estos invisibles…
Nadie notaria si yo me muriera- me dice-. Pues he sido invisible, fui ni el mas inteligente, ni el mas parecido, ni el mas popular.
No es lo mismo ser un bebe esperado, que el fruto de una pasión desenfrenada de una noche. Pues si algunos fuimos un accidente, entonces no tenemos la misma forma para pararnos ante la vida.

El paralítico da una orden con su mente pero sus piernas no le obedecen… pero el cojo sigue avanzando a pesar de su carencia y no se avergüenza de tus cicatrices. Es diferente.
Es propenso a soñar despierto… ¿Te atreves? Me atrevo. Se atreve a todo, pero en sus sueños, desde lo mejor a lo peor. Vive solo y tranquilo ridiculizando los tabúes, no se salta las prohibiciones, no las necesita, no se enfrenta a la autoridad, se ríe. Es capaz de todo, excepto de reconocer que mientras vivía en un hostil barrio, que mientras daba de comer a los malandrines, que mientras visitaba a los encarcelados, que mientras cada tarde alimentaba a los ancianos olvidados y acompañaba en juegos a los niños de su calle. Hizo mucho,  a su piedad y amor no les importó salir en la portada de los diarios,  nunca le importó tomarse una fotografía haciendo lo que hizo.  Fue mas que aquella coja sombra que creyó ser.  Fué la luz mas visible que pude ver.

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